El cuadro matecaña empató 1-1 frente a Boyacá Chicó en el estadio La Independencia, en un partido donde los dirigidos por Rafael Dudamel dominaron gran parte del juego pero vieron cómo en el tiempo de reposición se les esfumó la victoria.
Deportivo Pereira sumó un punto en su visita a Tunja, en un compromiso cargado de emociones y polémicas arbitrales. El encuentro, válido por la Liga BetPlay, terminó 1-1 ante Boyacá Chicó, con un desenlace amargo para los matecañas.
Primer tiempo con sello matecaña
El equipo de Rafael Dudamel mostró seguridad en zona defensiva y mayor claridad en la posesión del balón, practicando un fútbol colectivo que había sido esquivo en compromisos anteriores. Las triangulaciones, la salida desde el fondo y las transiciones rápidas fueron la fórmula que le permitió generar peligro.
Mejía estuvo cerca de abrir el marcador con un disparo que se estrelló en el palo, y Sebastián Quintero tuvo otra ocasión clara que no logró concretar. El premio a la insistencia llegó al minuto 26: un centro de Largacha desde el sector occidental encontró al goleador Samitg Meré, quien venció al arquero del Chicó y puso el 0-1 para los visitantes.
Reacción del local
En la segunda mitad, el equipo de Flavio Torres ajustó con algunos cambios que le dieron más control del balón. Pereira, en cambio, se dedicó a cuidar la ventaja y se defendió con orden, sin mayores complicaciones durante gran parte del complemento.
El penal de la discordia
Cuando parecía que la victoria matecaña estaba asegurada, en el tiempo de reposición llegó la jugada polémica del partido. El juez Carlos Márquez sancionó un penal sobre Jairo Molina en una disputa con José Moya. La acción generó dudas, pues no se evidenció una infracción clara. Con apoyo del VAR, la decisión se ratificó y Boca negra cambió el cobro por gol para decretar el 1-1 definitivo.
Sabor amargo
Una vez más, al Pereira se le escapan puntos valiosos en los minutos finales. No es la primera ocasión en la que los cambios no logran sostener el resultado y el equipo termina pagando caro en el cierre del compromiso.
A pesar del sinsabor, la hinchada continúa respaldando al cuadro matecaña, que mantiene su lucha en la Liga con la confianza puesta en este grupo de jugadores. El empate en Tunja deja un punto en el bolsillo, aunque la expectativa era sumar de a tres.